Equipo de Rescate

Impresiones y vivencias sobre el trabajo diario de un grupo de bomberos.

De nuevo la misma pregunta... 1

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Domingo 29-11-2009:

Otra vez la misma pregunta...¿en que fallamos?, otra vez la misma historia, y otra vez la misma cara, mezcla de incredulidad e indignación, al ver, como tantas otras veces, como un anciano que a duras penas puede mantenerse de pie, vive solo, o mas bien malvive en la soledad de una casa que no puede mantener en las mínimas condiciones de habitabilidad porque ni él mismo es capaz tan siquiera de cocinarse una comida digna. Así pues, repito, incluso aunque nadie llegue a leer esto...¿en que fallamos?, ¿como somos capaces de consentir esto?, ¿que asuntos "importantes" nos tienen tan ocupados?, ¿porque somos tan insensible?...

Ayer tuvimos una guardia intensa...ocho servicios nos mantuvieron bastante ocupados. Uno de ellos, una fuga de agua en una planta baja, nos descubrió, después de chapotear en un palmo de agua, a un anciano postrado en la cama, sólo, sin haber comido nada en todo el día. Y mientras nosotros solucionábamos el problema de la fuga, es decir, cerrábamos el grifo abierto de la pila de la cocina, aquel que el anciano se dejó sin darse cuenta ni de como ni de cuando lo hizo y recogíamos el agua del suelo de la vivienda, Javier, nuestro mando, se ocupaba, o más bien se preocupaba del anciano intentando, como en otras ocasiones, con sensibilidad, averiguar su estado y sus necesidades, para ver si, en la medida de sus posibilidades, podía variar de alguna manera, para bien, el destino, ese al que en tantas ocasiones hemos asistido y del que no quiero hablar.



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1 Reply to "De nuevo la misma pregunta..."

Anónimo on 30 de noviembre de 2009, 20:30

Era mi segunda guardia en el Oeste y se repetía el mismo servicio de la vez anterior. Había pasado tan solo un mes....misma vivienda, mismo anciano, misma situación. Yo también me pregunto, ¿qué pasa?, intento no juzgar a su familia, pero no puedo evitar entristecerme cada vez que recuerdo al anciano llorando en su cama cogido de mi mano, pidiéndome una residencia donde vivir dignamente....y yo impotente, tan solo ser capaz de acariciarle, y pedirle que por favor no llorara, que las cosas se solucionarían....Me hubiera gustado poder hacer algo más práctico por él, la verdad.

 

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